La sonrisa disimulada
Aquella que fui descubriendo
A medida que te iba conociendo
Estaba allí, para ser disfrutada.
Y era tanto su delicadeza
Que por momentos perdía la cordura
Y sonaba dentro de mi cabeza
Como sonido de rueda de fortuna.
Hermosa como ninguna
De gestos delicados y sensualidad extrema
Invitaban a observar
Y en la mente por siempre disfrutar.
No había cabida para la tristeza
Era una fiesta esa sonrisa
Que dejaban imaginar tu destreza
De admirar con pausa y sin prisa.
¡ hay de aquellos momentos ¡
Que fueron únicos y emocionantes
Y los disfrute en los furtivos encuentros
Que llenaron de alegría mi vida, como nunca antes.
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