El, de ella se enamoró más ese sentimiento, nunca se lo confesó quizás por miedo al rechazo y que su corazón quedara hecho pedazos.
Aunque el presentía
que ella ya lo intuía
y que ese sentimiento
de parte de él, iba en aumento
Sus diferencias eran abismales
en una sociedad acusadora, no serían normales
pues ella era muy menor
aun así, el semita amor.
Por ratos se envalentonaba
y quería dar el paso hacia el abismo
en otras ocasiones vacilaba
y se preguntaba así mismo, ¿será egoísmo?
El pretender enredar en su telaraña
a una joven que tiene por vivir muchas mañanas.
el, ya un tanto mayor
todavía da batalla y cree en el amor.
Y así pasaban los días
unos tristes, otros con alegría
pensando si se lo diría
que fuera para siempre su compañía.
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