A tus viejos

Si no das, no quites 

Si no sumas, tampoco restes 

Menos aún te hagas el desentendido 

Que el arrimado, como de lo escondido. 

Si no das buenas noticias 

Tampoco des malas 

Que para sufrir basta uno

Y para dar lástima, ninguno. 

En vano sirve lamentar 

Por aquello que puedes remediar

No cargues a tus viejos con tus pesares

Ellos están para que les cures sus males. 

No te hagas de la vista gorda

Al saber que alguno les está fallando 

A sabiendas que ellos están para recibir

Y no para que los hagas sufrir. 

No le quites la tranquilidad a tus viejos

Ellos hicieron por ti lo suficiente 

Y ahora es el momento urgente 

En que te reivindiques por eso. 

Dales tranquilidad 

Dales cariño 

Dales buenas noticias 

Genera en sus rostros, muchas sonrisas 

No permitas que a su edad sigan sufriendo 

Es momento que les des alivio y no tormento.