Somos como océano y arena
Que nos fundimos
en la inmensidad
Y luego desaparecemos
Mas emergemos con
más intensidad
Para ser playa y
golpe de agua sobre la orilla
Muy a pesar de tu
marcado interés por marcar distancia
Y de hacerte la
desentendida
En una acción apremiante,
aunque no compartida
A diario mantengo
el espacio que en mi corazón te pertenecía.
Pensé que esta
tregua que nos plantemos
Era lógica y
pasajera
Y que sin duda alguna iba ser una especie de termómetro
Para medir la
intensidad de los sentimientos
Y la verdad sea
dicha, y no aguanto tanto sufrimiento.
Cada pulsación de
mi interior
Me lleva directo
a tu corazón
Que con motivo a
sin razón
Quizás sufra igual
que el mío.
Todo esto es un hastió
Sentirte tan
cerca y tan lejos
Saborear los
besos fingidos
Tratar de frenar
hasta mis propios latidos.
Deseos de abrazarte,
sobran a cada instante
En todo momento,
en un silencio profundo
Trago bocanadas
de nostalgia para no llorar
Y darle a mi alma
un poco de tranquilidad.
Así como el océano
baña sus arenas a cada momento
Es lo que me
invade poder hacerlo
Y sentir en mi
pecho esta sensación
De poder quemarme
con tu calor.
Y no trato de
recriminar tu ausencia
Ahora ya no te
interesas por mí, que hago, como estoy
Y es entendible
tu accionar, no te debes complicar
Eso de vivir
enamorado, en tu caso, te ha de martirizar
Vivir dos vidas
al mismo tiempo
Debe de ser
tortuoso y también doloroso
Aunque te
confieso que tan doloroso es lo que hay por demás
Y lo que en mi
caso me toca pasar, tener nada, estando tan cerca.
Pensé que este
arrebato amoroso se diluiría con el tiempo
Y me hice a la
idea de irte perdiendo
Pero al contrario
de mis propias expectativas
Este amor a
rebasado toda ausencia y toda forma de vida.
Trato en vano de
asimilar esta distancia
Y hago mil modos
para hacerme a la idea de que pueda vivir sin ti
Pero de verdad ya
no puedo seguir fingiendo
Algo que lentamente
me va consumiendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por leernos