Esa mirada.

 Esa mirada tan penetrante

que me deslumbro desde el primer instante

y no quiero pasar por atrevido

pero tampoco podía dejar pasar este momento por desapercibido.

Hoy al verte, me sentí impactado

como un proyectil que fue disparado

directo a mis sentidos

algo que hace mucho tiempo no me había sucedido.

Al verte, sentí que me atraías como un imán

de esos que atrapan al metal

claro en este caso soy un mortal

que quedó impresionado por tu belleza.

Y no fue solo lo físico

también fue tu personalidad

que invadió mis sentidos

y me acelero los latidos.

Perdona mi gran osadía

pero esto no sucede todos los días

 de encontrar a una mujer demasiado hermosa

que solo es comparable con la más linda rosa.