El silencio de la ausencia, hace más notoria la presencia de los recuerdos, sin pretender traerlos al presente, es imprescindible dejar de mostrar indiferencia.
En medio de tanto ruido, escucho hasta tu aliento
y eso solo es motivado por el frenético latido dei corazón.
que no sabe de razones, solo se acelera por la emoción
de sentir que por sus torrentes, fluye tu esencia.
Sin dejar de evocar épicas batallas,
donde el denominador común era la pasión
que nos invadió todos los sentidos
a tal punto de experimentar un amor. que no fue permitido.
Mi mente me traiciona muchas veces
pues me refleja tu presencia como rayo de luz
y trato de atraparla para que me alumbre estos días sombrios
dónde mi alma siente frío, aun cuando el sol sale todas las mañanas.
No soy por echo, que estos recuerdos sean para siempre
y que tu imagen ya no vuelva a mi mente
pues dicen que el tiempo se encarga de poner las cosas en su lugar
más yo preciso de solo un instante, para, no poderte olvidar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por leernos