Cierro mis ojos
Y me invade la nostalgia
De aquellos días donde todo era alegría
Parece como una utopíaQue yo esté aquí solo
Recordando tu vida, junto a la mía.
Tumbado sobre mi cama
Recuerdo cuando dejabas de ser una dama
Y te conversas en una fiera en llamas
Y me saciaba con tus caricias
Y todo tu cuerpo era una delicia.
Que la podía saborear
Los instantes que te hacía mía
Y no por mitigar solo mis ganas
Sino también porque tú lo deseabas.
Abro mis ojos
Y de nuevo vuelvo a mi cruda realidad
De sentir la soledad
De mi cama
Y la frialdad de sus sábanas.
Aún tengo el aroma de tu piel
Y la asimilo para mí como un tesoro
De aquellos que son difíciles de encontrar
Y solo es posible, cuando verdaderamente puedes amar.
Todo lo que veo
Me lleva a tu figura
Aquella que era de insólita hermosura
Y me dejaba la piel alborotada
Y por dentro, toda mi alma aliviada.
Cierro nuevamente mis ojos
Y mi mente empieza a recordarte
De cómo cuando de tus ropas de despojaste
Y me invadió un sudor frío
Al saber que todo ese hermoso cuerpo
Finalmente sería mío.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por leernos